El Colectivo del Café Instantáneo, conformado por cinco artistas de diferentes orígenes, se autodefine como un grupo orientado al servicio. Sus bases principales se encuentran Toronto y Vancouver, Canadá, aunque con cierta regularidad prestan sus servicios en diferentes ciudades y países. Instant Coffee aparece en parte como una respuesta a la división y exagerada diferencia existente entre las actividades artísticas que se dan en los estudios de los artistas y las galerías de exhibición de sus trabajos. A través de instalaciones formales y actividades que tiene lugar en ellas, construyen un lugar público para las prácticas artísticas en el que las ideas, materiales y acciones pueden ser vivenciadas por fuera del espacio aislado del estudio y en una manera que cuestiona las estructuras tradicionales de la exposición pero al mismo tiempo las alberga.
Para el Colectivo, la triada conformada por la práctica de producción artística, la exhibición y la recepción, deviene en un estado informe que incorpora lo social como su prioridad. Instant Coffee encuentra que este sentido social toma forma en diferentes maneras involucrando las personas en los proyectos elaborados y también satisfaciendo su deseo de socializar. El trabajo se centra en la producción realizada pero igualmente depende de la participación de los otros, que apoyan, propician y potencian un discurso crítico. Para Casa Imago, el Instant Coffee presentó su instalación Nook: Wish You Were Here (Cabina: me encantaría que estuvieras aquí). Tal y como su nombre lo indica, la toma espacial de la galería es una invitación a compartir el espacio que crean con el emplazamiento de sus objetos y textos.
Cuatro tarimas de rodachines, cubiertas con tejidos de croché, un mecanismo de bolas de espejos giratorios, una equipo de sonido dispuesto para quien desee montar algunos acetatos o sintonizar una emisora, una pared llena con carteles impresos alusivos a la instalación y una cabina con un par de sillas y un termo de café para que los usuarios se sienten y sirvan la bebida caliente a voluntad mientras conversan, configuran el escenario donde los asistentes son invitados a pasar un rato relajado, conversando sobre la obra y sobre cualquier otro asunto o simplemente tener una siesta reparadora.
Carlos Galeano
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